Pies descalzos

Carabiru, autora de unas grandes fotos, unas grandes historias y unas grandes tartas y postres,  se ha propuesto hacer fotos este mes acerca de ella misma, anunciándolo como «Una pies descalzos»
Esto sólo ha sido un pretexto para que mi mente llame…las palabras a la memoria, y me diga:
¿de que te suena los pies descalzos?
http://www.flickr.com/photos/carabiru
http://www.flickr.com/photos/carabiru

Y la reacción ha sido dolorosa, debo decirlo.
Era 1997, yo me subí a bordo del vuelo de un fracaso anunciado.  El día anterior a aquel viaje, llegó a mis manos una cinta de los antiguos cassettes, de «los pies descalzos» de shakira,  quien para entonces era una colombiana que iba a los conciertos en vuelos comerciales, en clase turista, y cargada en sus hombros de una guitarra y una maleta en sus manos, tomaba un taxi directo al escenario.

El taxista, que me contó esta historia, era el que llevaba cada mañana a una chica, que al empezar su trabajo en un aeropuerto a las 5 de la mañana se veía obligada a usarlo como chofer.  Ella fue quien me regalo la cinta y Él quien me llevo en su taxi el día que volví de aquel viaje.   A los dos los conocí por separado y la coincidencia de la relación no la supe hasta varios años después.  Así, para mi, «pies descalzos» es el nombre de la banda sonora de un verano en Madrid.   Es la banda sonora de una aventura de mochilas, de descubrimientos y de fracasos.  Que a lo mejor son las  historias que  quiero ocultar» por no contar miserias,  en el lugar de unas simpáticas coincidencias.
«Pies descalzos» es también el primer libro que compre con salario de delineante, cuándo estudiante de arquitectura y con una vida totalmente plena de estudiante, me enganché a este texto de la aventura de mezclar el sentido social y la arquitectura.  «Esto es lo mío«, me dije, a la par que empecé a encontrar el sentido del azar que me llevo a escoger aquellos estudios.
Este es un post raro, a lo mejor es un escondite, es un acertijo en el que se halla oculto un mensaje de melancolía y del aprendizaje a la vez.  Una sucesión de casualidades, como los mejores aprendizajes

¿Cómo pillar hoy esta frase?:
«Pies descalzos»
Un ímpetu de  libertad que muchas veces intento coartar.
No sé bien que quiero contar, y no sé bien que quiero ocultar.  Este es un post raro, a lo mejor tan raro como el ansia que siento ahora, intentando escudriñar en esta actualidad liquida, en la que lo único con la que se puede contar es con la incertidumbre,  de a qué camino apostar, la misma incertidumbre que sentí  hace más de 15 años.

Mudando de PIEL

Lo que voy a contar no es un verso, ni quimera, es la realidad de ayer en la tarde-noche, a lo mejor es una fabula mía, pero como tal, es REAL.
He pasado varios días, casi desde que cambio el año, pensando, creyendo…convenciéndome, de que algo venía, algo terminaba, algo moría y algo estaba naciendo.  No tenía muy claro que pero como tantas otras veces he cometido el error de querer encontrarlo, definirlo y catalogarlo.  De pronto una suerte de ataque de cordura me ha llevado a tratar de escuchar a mi interior.
Intenté olvidar las categorías, la taxonomía y hacer un ejercicio de percepciones, intenté sentir y guiarme por mi intuición.
El resultado: ayer cogí mi bicicleta, usé cualquier pretexto y salí de casa, dejé que el viento me atropellara y me encontré con el Mar.
Recordé que mi compañera, cuando le alejé de su mediterráneo, me pidió prometerme que le ayudaría a que vea el mar por lo menos una vez al año.  No le entendí mucho, entonces, pero se lo cumplí y con creces, porque subimos a océano.
Recordé que conozco un querido surfero, que ahora vive en Madrid, porque tiene alma cosmopolita y como no se atreve con el manzanares, cuando está aquí, «va a ver el mar«
Recordé a Francisca, «la niña pancha» de LA TIGRA, cuando siente el llamado de la selva.
recordé que durante todo este tiempo de Mutación, una de los pesos mas grandes ha sido la ausencia de «mis montañas«, el entorno que probablemente era el icono de mi territorialidad, es decir el suelo de mi identidad.
Pues ayer, quise, necesité, ver el mar, y con ello creo que me he graduado de AQUÍ, dejando un Allá, en el interior de mis experiencias.
No contento con eso, y sobre mi bicicleta, sentí que ese llamado que tenía dentro, era a todos mis sentidos.  Era una llamada del territorio a mis percepciones y una necesidad de probar mi pertenencia.  Estaba atardeciendo y pronto obscureció, justo en el momento en que al meterme en mi pequeña ruta, empecé a sudar y aventurarme en medio de la penumbra de una noche de luna por los caminos del cabo, entre rocas, calas, algo de arena y un poco de  arbustos, sentí o me dejé llevar por los senderos, como intentando probar hasta donde llegaba mi percepción de la sinuosidad de cada sendero, de cada calita.
Cuando terminé, intacto, sin caídas y seguro de que era así porque hoy es ese mi camino, me detuve y quise grabar el sonido del mar, más que en un dispositivo, dentro mio, que creo que es el sonido que hoy llevo dentro.
Este creo que es uno de los post más íntimos que he hecho, sepan guardarlo o compartirlo, según su interior.

Por qué de todo esto?

¿Por qué de todo esto?
Estoy describiendo mis entornos de trabajo y su multiplicidad de posibilidades de desarrollo. He descubierto lo que antes he descrito, mis entornos de trabajo se explicitan como ecosistemas, que tienen distintos niveles de destrezas digitales.  Mi intención al estudiarlas e investigar sus características y comportamiento, responde a la necesidad de ir estructurando mi proyecto del masterDIWO, con ello pretendo abrir una taxonomía inteligente de las herramientas, es decir, lograr una clasificación de las herramientas de acuerdo a como las veo dentro de su potencia y uso para juntar ecosistemas de trabajo y lograr que de esa unión nazcan verdaderas redes digitales, en las cuales es donde realmente se puede aprovechar la máxima potencialidad de ellas.
Quiero destacar dos enlaces de información en este contexto:
Un primero, que es el vídeo que representa para mi el porqué de la autoformación.

[youtube http://www.youtube.com/watch?v=AZ3JmuaUrxs]

Y un segundo que pretende justificar la necesidad actual del trabajo en red, pero sobre todo en una red digital, entendiendo lo digital como un mundo de herramientas, ágiles, contemporáneas y sobre todo de una capacidad de expansión infinita.

[youtube http://www.youtube.com/watch?v=R3LcLQXk9cg]

De ecosistemas a red global [visualización de red global]

Una siguiente opción de trabajo, diría yo, más progresista, se da en el momento en que un individuo establece relaciones digitales de una esfera de instrumentalización más desarrollada respecto a los ecosistemas con los que se comunica.

En este caso, es él el que se convierte en un estimulador del uso de mejores herramientas, los ecosistemas se envuelven en un desarrollo de alfabetización digital mientras trabajan, y a su vez este individuo se convierte en vínculo con otros sistemas de igual o mejor desarrollo digital.

Algo muy importante es que el mayor desarrollo de destrezas digitales está siempre ligado a una dimensión mayor de la magnitud del nuevo ecosistema que se empieza a gestar.  Cuando este rompe las fronteras establecidas anteriormente, reconoce una estructura que ya no es plana, en la conformación del ecosistema y por tanto su posibilidad espacial se expande en una dimensión de red digital.

Relaciones entre ecosistemas digitales

Dentro de un ecosistema, la comunicación que se establece entre los distintos actores de una comunidad,  evidentemente es a través de herramientas, éstas más que por su utilidad, representan un nexo que forma parte del biotopo, es decir que crean un ámbito de confianza, que en su expresión mas potente es la  sensación que representa estrechar la mano de un colaborador dentro del ecosistema, gesto con el cual de alguna manera se cierra  ese equilibrio propio de él.

Al referirme a las herramientas empleadas, creo justificado no entrar en otros nodos de satisfacción como el estatus  institucional, el beneficio económico de colaboración y demás, que no son o no quiero que sean objeto de estas reflexiones.


Existen otras posibilidades de interacción, dos ecosistemas, sean profesionales, institucionales o de negocios, entre ellos en un primer momento no existen relaciones, o pueden no existir.
Cuando pienso en la posibilidad de que eso suceda, entonces la visión interelacional cambia.  Imagino un ecosistema A, confrontado a un ecosistema B, entre ellos no existe nada en relación hasta que se da a través de una primera conexión, esta sub genera una segunda y eso de una manera casi viral permite que los unos se enlacen con los otros. todo esto a través de herramientas, que hoy en día en su mayor parte son  digitales.


Desde la perspectiva del análisis, en ese momento el ámbito en donde se cultiva la sensación de confianza (equilibrio) propia de una ecosistema,  pasa a ser el «aire» que está entre los dos y por tanto nace una nueva biocenósis.
Pero esto en principio suena muy sencillo, pero está atado a las destrezas digitales, de cada individuo e incluso siendo capaces de cualificar, aunque sea de manera empírica, casi intuitiva, yo diría que es bastante claro el percibir el nivel de destreza digital de un ecosistema.  Cuando estás inmerso dentro de un ámbito de actuación, percibes a quien le cuesta enviar un mail, hacer una llamada, una entrada de blog, una reunión analógica etcétera.  en este tipo de relaciones entre ecosistemas, es normal, que el crecimiento en destrezas digitales, no sea potenciado, puesto que son muy duros y sus herramientas están pre establecidas y la posibilidad de tomar soluciones analógicas es grande.

La Extensión de la BIOcenosis

Intentando comprender las interacciones de mi masterDIWO desde el funcionamiento de un Ecosistema, he visto que hay muchas más relaciones de las que podía imaginar.  Encuentro que las intenciones de mis proyectos, a día de hoy, están centradas en conectar dos ecosistemas, y esto me ha preocupado profundamente, puesto que no pretendo nada más que entender lo que estoy investigando.

He atendido a los entornos en los que me estoy desenvolviendo y he detectado que los proyectos que tengo en manos, tienen un propósito que no lograba comprender en que momento se volvían reacios a las posibilidades de innovación y por ello la dificultad de que sus condiciones de factibilidad se volvieran positivas.

Me parece que lo más importante dentro de la relación de los organismos de una biocenósis, es la manera en que se da su intercambio de acciones.  En el entorno de trabajo, esa relación está fundamentada en una teoría económica de consumo, que propone un modelo de negocio que vuelve a todo profesional proponente de servicios que son consumidos (en el caso particular, contratados) para generar un producto o servicio «vendible» a mejor o mayor cuantía, es decir que el contratante es meramente un intermediario que renta por un oficio que está bastante indefinido, amparado generalmente en las relaciones, en definitiva, re-vende un producto o servicio a mayor costo, para quedarse con la diferencia.  Estas «normas» de relación no están definidas, pero son aceptadas por la mayoría de relaciones profesionales, porque generan unas relaciones que se sostienen por el fin mayoritario y ultimo de todas, la generación económica y por tanto mantienen un determinado equilibrio en base a la avaricia, el dinero, el consumo  y escasamente algún plus agradado de otra índole.

En ese entorno, las relaciones son casi totalmente analógicas, las herramientas de relación, como en la mayoría de los casos, atienden necesidades de una inmediatez que puede ser reemplazada por la presencia, entonces si, realmente analógica.

«Si no me coges el móvil, me paso a verte»

expresión únicamente posible cuando cuando el biotopo es territorial real, cuando existe la posibilidad de presencia física concreta.

Intro

El Master DIWO:

Nace como una posibilidad de resolver dos objetivos fundamentales:

por un lado la contextualización de mis destrezas, dentro de un mundo global y mediante de herramientas digitales, que me permitan una exploración laboral, venta o intercambio de mis habilidades en otros entornos más amplios.

Una intención de cursar aprendizajes en tecnología digital.
Tengo un know how, fuera de un entorno de aplicabilidad y eso me excluye de un entorno analógico determinado.  Mis habilidades son locales y creo que solo la cultura digital y el trabajo en red me puede permitir poner en valor y aplicar a opciones laborales que me inserten en un marco global.

Por otro lado, el experimentar unas condiciones de prototipado metodológico, investigar con método y generar conocimiento que me permita gestionar de manera más eficiente los proyectos actuales y sus posibilidades de proyección a través del uso de herramientas digitales:

etiquetas?asignaturas?temas?:

Creo que esto irá cambiando, poco a poco y me podré ir enterando mejor de a donde me conduce lo que investigo.

herramientas

en lo digital y lo analógico, definir herramientas estratégicas de utilidad específica, su instrumentalización y  el impacto en los entornos de trabajo.
entornos 

cuales son mis entornos de trabajo, de intercambio, creo que debo (aunque no quiero, dividirlos en lo analógico y lo digital), a ver?o pueden existir categorías que implícitamente mixtifiquen las dos y me sean útiles:

intercambios

otras formas de canjear, ser remunerado por algo más que el dinero (otros modelos de negocio) que me sean satisfactorios, por ejemplo la generación de red.

producción

Todas las iniciativas que llevo entre manos.  generar una bitácora inteligente, conectar los hechos de acción-reacción y analizar y concluir…aprender y proyectar.

Tokio blues

Cuando leí After Dark, creo que llegué a ser peyorativo con la historia y muy elogiador con los elementos visuales, que para mi marca Murakami con un acento mayúsculo en su literatura.Ahora, todo lo contrario, he disfrutado tanto Tokio blues, que realmente tengo que decir que es casi como si he visto una telenovela!!!como dicen por aquí un absoluto culebrón.  Poco más tengo que decir que no sea ponerme a contar la historia. Enfatizar las dos cosas que ya antes mencioné de la narrativa de Murakami: los detalles en la composición de las imágenes, de cada escena, de cada cuadro, casi armando una composición que tiene más facha de guión audiovisual que de novela.  La exquisitez de la banda sonora y ahora un elemento adicional, que es la coherencia en profundidad de su novela.  La manera como permite que el lector sea capaz de sentir emociones a través de los personajes y que esas emociones te trasladen a un ámbito reflexivo que sea capaz de dejarte un MENSAJE, en este caso muy potente!!!

 

De cara al otoño: Entre Tulsa y recuerdos

Hoy ha habido un tún tún a mi puerta.  Ha sido la radio y me ha contado que la cantante de TULSAMiren Iza, se va a Nueva York.  Me ha sido inevitable sentir un abandono.
Pero: ¿ por qué de una cantante a la que ni siquiera he visto en vivo?
El verano anterior, a finales, casi exactamente hace un año, escribí este post, hoy lo he releído y me ha gustado, sobretodo la asociación de imágenes que se puede ver.  Pero me ha permitido también recordar que a propósito de aquel descubrimiento de hace un año, compré el CD, y Estúpida y Oviedo fue la canción del otoño dentro de mi banda sonora y de una manera muy marcada, gracias al énfasis que mis chicos le pusieron.  Hoy, un año después, los chicos saben perfectamente quien es Tulsa, saben de memoria las letras de sus dos canciones preferidas, pero lo que está dentro de todo esto, sobre todo, dentro mío y espero que de los chicos, es verdaderamente el timbre de la voz de Miren Iza, la melancolía que es capaz de transmitir, el arte de las analogías, metáforas y más figuras de sus letras y el virtuosismo de sus músicos.  Espero que este nuevo paso de Miren Iza, sea un proceso de crecimiento tanto como es para mi el ir descubriendo las cosas tan valiosas que me da el estar atento a mi entorno.  Me siento crecer con todo esto, ya que de otras maneras no se puede.
Por cierto, se va por la psiquiatría, no por la música.

 

espejito

Algún día se enterarían de quién era el que movía el espejito, era mi regalo de la mañana, el espejo móvil estaba a la izquierda, su foto de los veinte años a la derecha, al momento de maquillarse, mamá legañosa y recién levantada se miraba despacito y tan pronto como agachaba la mirada al grifo yo movía el espejo enfocando a la foto, ella alzaba la mirada y se volvía a encontrar con la edad en la que me tuvo, me regalaba ese cachito de sonrisa cariñosa y se seguía maquillando, cuanto me pesa haberme ido.

whatchig the wheels y la obediencia

No siempre es falta de entereza ni exceso de timidez. hay veces en que es solo orden de prioridades, inteligencia, estrategias y más. Hay veces en que aparentar obediencia es supervivencia y hay veces en que es estar más arriba…más allá o mas acá. Hay veces en que simplemente es estar viendo las ruedas girar.

Otro cine

Hay veces en que uno se hace compromisos con uno mismo.
El año pasado la mejor película que vi fue el secreto de tus ojos y creo que eso consagró a Ricardo Darín como uno de los mejores actores, y siempre que hablo de Él no puedo dejar de mencionar la película por la que le conocí, que sigo creyendo que aunque Él no ha dejado de mejorar, es una de mis películas preferidas, Nueve Reinas.
Este año he visto poco cine, pero si hay alguna película por la que se debería premiar a Bardem es por biutiful, bueno en realidad no sé a quién es que hay que premiar, a lo mejor a Alejandro González Iñarritú…casi que me da igual, creo de verdad, que hay un cine que se sale de competencias. Son más bien algo como una experiencia sensorial, que al final de verla solamente te queda un estado, una sensación…
Y recuerdo desde Jamón y Jamón a no es país para viejos, pasando por Amores Perros, 21 gramos y Babel; Recuerdos todos estos con música de fondo de Gustavo Santaolalla, a lo mejor Ronroco…que me manda mis raíces andinas.
Pero más allá de mis recuerdos y de todos los Goyas que mañana se va a llevar Bardém, y por eso la oportunidad de este post y de mi auto compromiso, es que realmente creo que el cine de Darín, el de Bardém o el de Alejandro González….y muchos más que recuerdo, realmente son una experiencia más que una industria y un negocio.