Hace algo más de un año, el 28 de diciembre del 2012 estaba saliendo de viaje. Un viaje que me abriría una puerta…puerta… a un capítulo de investigación que me interesa muchísimo.
El proyecto que desarrollé junto a López y López arquitectos en Alausí y que lo podéis seguir en la etiqueta del mismo nombre aquí en este espacio, me permitió contrastar un gran capítulo que llevaba pendiente: La práctica del ejercicio de la arquitectura y el urbanismo en entornos protegidos por condiciones patrimoniales y, por otro lado, la teoría acerca de la geolocalización y la instrumentalización digital como herramientas de visualización de la complejidad. Todo esto funciona y no solamente de una forma instrumental, es más, a día de hoy es imprescindible el uso de herramientas para ser capaces de permitirnos lecturas transversales de las problemáticas urbanas, ésto, sobre todo, comprendiendo «lo urbano» desde la complejidad y desde una biocenósis urbana.
En el desarrollo de este estudio hubo un momento en el que el ejercicio de intenciones desde la visión de lo que podríamos llamar el urbanismo académico-clásico, dejaba entrever que existían agujeros, vacíos que desde la técnica no eran posibles ni de comprender, menos aún de subsanar y dado que era el caso en que la ciudad albergaba un valor patrimonial sólido e importante para el cual la investigación histórica era evidentemente insuficiente, el proceso de investigación nos demandó el confrontar con la realidad «a pie de calle».
Ésto implicó una visita prolongada y derivas de una variedad amplia para poder reconocer muchas de las cosas que los documentos no te cuentan; muchos de los datos levantados fueron probablemente inclasificables pero esa realidad palpada fue imprescindible para la toma de decisiones. Este post introductorio pretende narrar la necesidad, no solo de la toma de contacto con la realidad «a pie de calle», sino además, expresar una profunda confianza y exponer una metodología muy real y palpable de la deriva como método de análisis del entorno urbano.
Algunos de los elementos de registro de dichas derivas se encuentran contenidos en los enlaces de Alausí 2.0. Procuré de llevar un registro del proceso que me permita, lectura atrás, poder estructurar una metodología (a toro pasado) y la verdad me ha llevado algún tiempo, sobre todo, poder documentar y dar un sustento teórico a lo mencionado, pero a partir de esta entrada (que abre la categoría) procuraré ir armándolo mejor de manera que permita estudiarlo, reprisarlo o simplemente ponerla en condiciones didácticas para un re uso de metodología de análisis e intervención del espacio urbano. Por otra parte, estoy estudiando las posibilidades de iniciar talleres tanto teóricos como prácticos que permitan ejercicios que consoliden la metodología como instrumento de análisis del entorno.